Las grandes estructuras y puentes de acero están expuestos a las condiciones climáticas exteriores, la lluvia ácida y la contaminación industrial, lo que acelera la corrosión y reduce la seguridad estructural.
Los recubrimientos de zinc y aluminio por pulverización térmica se aplican a superficies de puentes, torres, tuberías y estructuras de edificios para crear una barrera anticorrosión densa y duradera.
Este método reemplaza la pintura tradicional, ofreciendo una adhesión superior y una protección más prolongada contra la corrosión.
Puentes de carreteras y ferrocarriles
Torres de acero y estructuras de transmisión
Estructuras de construcción y tuberías exteriores
Fuerte adherencia y larga vida útil del recubrimiento
Reducción de la necesidad de repintar
Mayor durabilidad estructural
